Ponciano Montañés
Parece, nada más parece, que el asesinato contra los cuatro salvadoreños sucedido en Guatemala comienza a esclarecerse, lo mas importante del caso, es que el crimen como lo señalaba en mi artículo anterior “Violencia Irracional” ha comenzado a perder todo peso objetivo para ser considerado un crimen político al verse inmiscuidos, según la prensa y la fiscalía del país guatemalteco, cuatro policías de la PNC de ese país. Sin embargo, en casos como éstos, muchas veces los verdaderos culpables se protegen bien tras barreras impenetrables por los aparatos de investigación de nuestros países mandando a las mazmorras y al patíbulo a gente que en realidad nada tuvo que ver con el crimen.
Hipotéticamente hablando, si es cierto que estos policías fueron los hechores materiales de tan horroroso crimen, se tiene que investigar de quien recibieron la orden y cuales fueron los motivos para que este alto jefe militar o civil haya dado dicha orden. Como dije antes, la muerte de los cuatro salvadoreñas no beneficia a ningún gobierno ni partido político, ni a la población en general ya que la población luchamos porque se cumplan los “Acuerdos de Paz” y estamos cansados@ de ver correr la sangre de nuestro pueblo a lo largo de las calles memoriales de la nación.
Aplaudir un crimen de esa naturaleza bestializa a quien lo haga, quedarse callados y dar como verdad absoluta todo lo que diga la prensa e investigaciones inmediatas y superficiales nos hace irresponsables, ya que solo descubriendo la verdad y llevando esa verdad objetiva y transparente a la opinión publica es que futuros crímenes de esa naturaleza se van a evitar.
El problema está en quien confiar dicha investigación? A los gobiernos derechistas del medio, no, ya que ellos lo que hacen es acusar a la oposición y sellar, encerrando en el calabozo impenetrable las investigaciones cuando éstas, están por llegar a la verdad. Dejarla en manos de los norteamericanos, es aun peor. Los Estados Unidos es el país donde las muertes de los importantes jamás tienen explicación. Sería quizá, la Comisión de derechos humanos de la ONU o la Asociación de Abogados Sin Fronteras, o designados de la Corte Internacional de Justicia los que podrían sacar a luz, el crimen que por el momento tiene a todo el mundo (menos a los hechores materiales e intelectuales) en limbo permanente.
Mientras tanto os invito a pronunciarse contra toda violencia en nuestro pueblo.
Parece, nada más parece, que el asesinato contra los cuatro salvadoreños sucedido en Guatemala comienza a esclarecerse, lo mas importante del caso, es que el crimen como lo señalaba en mi artículo anterior “Violencia Irracional” ha comenzado a perder todo peso objetivo para ser considerado un crimen político al verse inmiscuidos, según la prensa y la fiscalía del país guatemalteco, cuatro policías de la PNC de ese país. Sin embargo, en casos como éstos, muchas veces los verdaderos culpables se protegen bien tras barreras impenetrables por los aparatos de investigación de nuestros países mandando a las mazmorras y al patíbulo a gente que en realidad nada tuvo que ver con el crimen.
Hipotéticamente hablando, si es cierto que estos policías fueron los hechores materiales de tan horroroso crimen, se tiene que investigar de quien recibieron la orden y cuales fueron los motivos para que este alto jefe militar o civil haya dado dicha orden. Como dije antes, la muerte de los cuatro salvadoreñas no beneficia a ningún gobierno ni partido político, ni a la población en general ya que la población luchamos porque se cumplan los “Acuerdos de Paz” y estamos cansados@ de ver correr la sangre de nuestro pueblo a lo largo de las calles memoriales de la nación.
Aplaudir un crimen de esa naturaleza bestializa a quien lo haga, quedarse callados y dar como verdad absoluta todo lo que diga la prensa e investigaciones inmediatas y superficiales nos hace irresponsables, ya que solo descubriendo la verdad y llevando esa verdad objetiva y transparente a la opinión publica es que futuros crímenes de esa naturaleza se van a evitar.
El problema está en quien confiar dicha investigación? A los gobiernos derechistas del medio, no, ya que ellos lo que hacen es acusar a la oposición y sellar, encerrando en el calabozo impenetrable las investigaciones cuando éstas, están por llegar a la verdad. Dejarla en manos de los norteamericanos, es aun peor. Los Estados Unidos es el país donde las muertes de los importantes jamás tienen explicación. Sería quizá, la Comisión de derechos humanos de la ONU o la Asociación de Abogados Sin Fronteras, o designados de la Corte Internacional de Justicia los que podrían sacar a luz, el crimen que por el momento tiene a todo el mundo (menos a los hechores materiales e intelectuales) en limbo permanente.
Mientras tanto os invito a pronunciarse contra toda violencia en nuestro pueblo.
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