martes, junio 05, 2007

Consideraciones sobre el “Planeta Saca”

“No, definitivamente Antonio Saca no es un tipo de este mundo. Por donde quiera que se le mire el presidente salvadoreño, como mínimo, habita en otro planeta”. Así inicia el periodista Luís Álvarez la nota “Planeta Saca” en su columna “Sin Fronteras” (en la edición del miércoles 30 de mayo de 2007) del prestigioso diario angelino La Opinión.

“Hay que ser de otra órbita para atreverse por estos días a viajar a Irak, como lo hizo Saca, para ratificar el respaldo a una guerra en la que el mismísimo presidente Bush comienza sigilosamente a recular”, dice el segundo párrafo. Pero dejemos para después nuestras consideraciones sobre esta importante nota; antes queremos compartir el texto en su totalidad, el cual señala lo siguiente:


“Humm, pareciera que las comunicaciones satelitales aun no llegan a su mundo, pues el gobernante aun no se entera de que el empecinamiento en ese conflicto estéril (bueno, en realidad no tanto, pues sí ha dejado como “frutos” miles de vidas perdidas) le ha costado al gobernante de Estados Unidos el quedarse virtualmente solito en su causa.

Pero Saca tiene sus razones. El está convencido de que su visita ayudó a “elevar la moral” del octavo contingente de casi cuatrocientos hombres que Saca envió a rifarse la vida al otro lado del planeta.

Y si subió la moral de los 400 soldados, ¿qué habrá hecho con la de los otros 6.7 millones de salvadoreños? Porque las encuestas le han dicho hasta la saciedad que el pueblo no respalda la participación en esa que no miran como su propia lucha.

Pero es cuestión de aritmética. Saca, como buen periodista, conoce “mucho” de números y entiende que 400 es más que 6.7 millones. El hace sus cuentas con una precisión satelital envidiable.

Como decía el poeta Antonio Machado, “que dos y dos sean necesariamente cuatro, es una opinión que muchos compartimos. Pero si alguien sinceramente piensa otra cosa, que lo diga. Aquí no nos asombramos de nada”.

Vamos, no seamos tan pesimistas. Talvez las cosas son del tamaño que Saca las mira. El mismo Machado cuenta cómo de niño creía siempre que sus juguetes eran más grandes que los del vecinito...hasta que su propia mamá lo sacó del engaño: ¡la más cruel desilusión de su vida!

Y a Saca ¿quién lo saca del engaño? Tal parece que aún nadie se atreve. En su órbita gubernamental giran algunos satélites, con cara de ministros de gobierno, que aseguran que no es cierto que El Salvador sea un país tan violento.

René Figueroa, el flamante ministro de Seguridad Pública y Justicia está convencido de que esa es una vil mentira, una de esas patrañas arteras que los infames izquierdistas del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) han echado a volar para hacer añicos la imagen del gobierno.

Que un puñado de salvadoreños (apenas el 70%, según una reciente encuesta de la Universidad Tecnológica de San Salvador) asegure que la violencia y la delincuencia son el principal problema del país, es un detalle de poca monta.

¡Ingratos! ¡Malagradecidos! ¿Cómo es que no pueden observar la magnificencia de la obra gubernamental de Saca? Porque también más del 70% de la población cree que el presidente, después de tres años de gestión, no está resolviendo los problemas del país.

¿Será que el problema de Saca es que se mete en su mundo y de allí nadie lo saca...?”.

Y es con la anterior interrogante como finaliza el texto periodístico “Planeta Saca” escrito por Luís Álvarez en La Opinión. Pues bien, podemos decir que Saca no solamente está encerrado en su mundo, sino que la derecha salvadoreña está más dedicada a la campaña electorera en vez de interesarse en resolver los problemas que demanda la inmensa mayoría del pueblo salvadoreño. Si bien El Salvador tiene un presidente (producto de un enorme e inocultable fraude) su prioridad es el desempeño como presidente de su partido, Arena.

Mediante esa prioridad, Elías Antonio Saca no sólo quebranta las leyes del país; Saca demuestra, así, que está más preocupado en darle continuidad a una campaña que en ningún momento se ha desmontado desde los dos últimos procesos electorales (2004 y 2006), como consecuencia del respaldo popular que el FMLN ha incrementado por ser el único partido que realmente representa una clara alternativa de gobierno para efectuar los cambios necesarios desde el Órgano Ejecutivo.

Pero ¿Cuál será ese planeta en donde Saca habita?, según expone el periodista Álvarez. Ese planeta (o subplaneta) que ha creado la derecha salvadoreña para seguir favoreciéndose y dejar de lado la solución a las demandas del pueblo salvadoreño, es el planeta donde la mentira ha sido impuesta como una moda y como estrategia a través de una excesiva, inmoral, onerosa, ridícula y erosiva campaña publicitaria; erosiva por cuanto hay un desmedido gasto del erario que Elías Antonio Saca distribuye entre su consorcio de radiodifusoras y los demás medios (radios, televisoras y periódicos) que mantienen un sistemático y permanente bombardeo publicitario a favor del gobierno y, por otra parte, arteros ataques a la oposición que representa el FMLN.

Ese derroche inmoral de recursos (dólares) es utilizado para inundar espacios con toda clase de impresos, spots televisivos y cuñas radiales en donde lo que abunda son frases vacías de contenido con el objetivo de mantener en las mentes ingenuas una inyección alienante que provee un paisaje irreal sobre El Salvador; es decir, que la abundancia de falsedades presenta cosas que no se hacen o no se han hecho, y las nimiedades que se hacen son agigantadas desproporcionadamente. Pero lo más grave de esta argucia es que está marcado tácitamente un obsceno esquema de enriquecimiento ilícito.

Lo anterior, sin duda, permite al presidente de Arena (y de la república) mentir y mentir, viajar y viajar constantemente, sin que los grandes medios y los chicos, los que más facturan y los que aprovechan menos, se interesen por señalarle los errores y las ilegalidades que comete, aunque en esos arrebatos de protagonismo publicitario haga ridiculeces (más bien estupideces) como esa de la reciente gira turística al Oriente Medio al vestirse de militar para ir a “elevar la moral” al contingente de soldados salvadoreños que participan de la invasión a Irak. Esa payasada de Saca, y posando a la par de su ministro y socio René Figueroa (también con uniforme militar) resultó ser una postal del Sargento y Beto, personajes principales de la tira cómica “Beto el Recluta”.

Cuando Álvarez expone que “Saca, como buen periodista, conoce mucho de números y entiende que 400 es más que 6.7 millones”, esa debe ser una clara ironía, sabiendo que Saca ni es periodista ni ha ejercido—por supuesto—el periodismo. Lo que sí hizo, a medias, fue narrar juegos de fútbol en un canal que pertenece a la telecorporación que es la principal empresa televisiva que recepta un enorme porcentaje del excedido e inmoral gasto publicitario gubernamental. Aunque en algún tiempo gente de su entorno se referían a él (Saca) como “licenciado”, algo que es normal en El Salvador, lo cierto es que su nivel intelectual no va más allá del bachillerato.

Pero ¿cómo alguien que simplemente es bachiller puede llegar a ser presidente de El Savador?, será la millonaria pregunta que muchos se hacen. La verdad es que para el esquema oligárquico-mafioso salvadoreño las credenciales de moralidad e intelectualidad no son requisitos indispensables para mantener el dominio y la opresión, la pobreza y la inseguridad, la falta de una verdadera administración de justicia y un pésimo servicio de salud y educación para el pueblo. Es más, de un pobretón hacer un ricachón es la garantía para sus propósitos, toda vez que el individuo esté dispuesto a violar la Constitución y las demás leyes del país, que tenga facilidad para la mentira y el engaño y una gula desmedida e insaciable por el dinero. Esas son las credenciales de Saca.

Y ahora, cuando ya se cumplieron 18 años de nocivos gobiernos areneros y se dio un intrascendente informe del tercer año del gobierno planetario de Saca, solamente exaltado por los medios indecorosamente pagados, el pueblo salvadoreño, por su parte, tendrá que soportar 2 años más de propaganda cargada de falsedades, de frases, de “slogans” que dicen cualquier cosa, cualquier ocurrencia gubernamental; la gente seguirá con esa admirable paciencia observando el tropel de una derecha desesperada arremetiendo con sus incumplibles promesas y sus prepotentes e insanas ofertas: un par de dólares o un par de libras de frijoles a cambio del voto suicida; esa repugnante derecha que ofrece unos cuantos dólares porque el ciudadano le entregue su DUI para viles acciones.

Pero ahí va la gente; y ese 70%, que según la encuesta de la Universidad Tecnológica, que reclama solución para los problemas del país se ensanchará para que antes de 2009 esa burbuja publicitaria de Saca esté pinchada y...desinflada. Será el ocaso del planeta Saca...y de los nefastos planetas areneros.


Comisión de Comunicaciones
FMLN-Los Ángeles.

No hay comentarios: