San Salvador, 11 abr (PL) Desde enero a la fecha cuatro mil 730 salvadoreños han llegado al país deportados desde Estados Unidos, debido a las políticas migratorias de ese país, reveló hoy la Dirección de Migración y Extranjería.
El director de esa entidad, Rafael Alvarez, detalló que el año pasado en el mismo período fueron expulsados dos mil 267 salvadoreños.
Alvarez explicó que el 26 por ciento de ellos no tiene ninguna deuda judicial con la nación norteña.
Según Migración, el número de deportados desde ese país se duplicó en relación con igual etapa de 2006.
Instituciones salvadoreñas a favor de los derechos humanos afirmaron que las propuestas para reformar la ley migratoria presentadas el lunes pasado por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, son una trampa.
Los emigrados no podrían pagar los precios de los trámites para legalizar su status allí, y en caso de poder tendrían que regresar y hacerlo a través de la Embajada de Estados Unidos en este país, tras lo cual quedarían automáticamente "deportados".
Pese a la cada vez más restrictiva política de lucha contra la inmigración ilegal en EE.UU., 2,5 millones de salvadoreños viven y trabajan en ese territorio, buena parte aún ilegalmente.
Datos del Centro de Recursos Centroamericanos, organización que trabaja por los derechos de los emigrantes, indican que unas 700 personas abandonan el país diariamente con el fin de mejorar sus condiciones de vida.
El director de esa entidad, Rafael Alvarez, detalló que el año pasado en el mismo período fueron expulsados dos mil 267 salvadoreños.
Alvarez explicó que el 26 por ciento de ellos no tiene ninguna deuda judicial con la nación norteña.
Según Migración, el número de deportados desde ese país se duplicó en relación con igual etapa de 2006.
Instituciones salvadoreñas a favor de los derechos humanos afirmaron que las propuestas para reformar la ley migratoria presentadas el lunes pasado por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, son una trampa.
Los emigrados no podrían pagar los precios de los trámites para legalizar su status allí, y en caso de poder tendrían que regresar y hacerlo a través de la Embajada de Estados Unidos en este país, tras lo cual quedarían automáticamente "deportados".
Pese a la cada vez más restrictiva política de lucha contra la inmigración ilegal en EE.UU., 2,5 millones de salvadoreños viven y trabajan en ese territorio, buena parte aún ilegalmente.
Datos del Centro de Recursos Centroamericanos, organización que trabaja por los derechos de los emigrantes, indican que unas 700 personas abandonan el país diariamente con el fin de mejorar sus condiciones de vida.
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