La Habana, 21 abr (PL) La determinación de las autoridades estadounidenses de liberar al terrorista Luis Posada Carriles aviva hoy el repudio de la comunidad internacional, con un mensaje coincidente de reclamo de justicia, encabezado por Cuba y Venezuela.
Declaración de NOAL contra liberación de Posada Carriles
Salvadoreños marcharán contra liberación de Posada Carriles
Organizaciones españolas repudian liberación de Posada
Cubanos firmes en su condena a excarcelación de terrorista
Escritor boliviano repudia excarcelación de Posada Carriles
Indígenas ecuatorianos condenan liberación de terrorista
Cientos de jóvenes y familiares de las víctimas del atentado en 1976 contra un avión civil cubano con 73 personas a bordo, en Barbados, perpetrado por el terrorista, participan en una vigilia en esta capital, como parte de las acciones de rechazo a la medida.
Esa velada debe terminar en horas de la tarde de hoy frente a la Oficina de Intereses norteamericana, en la avenida costanera del Malecón, en la capital cubana.
El comité venezolano por la extradición de Posada Carriles anunció el comienzo de una nueva jornada para insistir en la detención del criminal y denunciar la parcialidad de la Casa Blanca en el tema.
Varias ciudades norteamericanas se preparan para una protesta el próximo 11 de mayo, convocada por la coalición antibelicista ANSWER y el Comité Nacional por la liberación de cinco antiterroristas cubanos presos en ese país desde 1998.
Dennis Kucinich, legislador demócrata norteamericano, consideró que Posada Carriles debe ser extraditado a Venezuela, desde donde se fugó en 1985, para ser juzgado por sus crímenes.
Aseguró que desencarcelar al terrorista internacional es un acto de negación de la "guerra contra el terrorismo" supuestamente alentada por Washington.
Dirigentes del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) de El Salvador calificaron de insulto a Latinoamérica la liberación del criminal tras pagar una fianza de 250 mil dólares, que lo sacó de una cárcel de Nuevo México.
Medardo González, coordinador general efemelenista, catalogó de irresponsable la decisión de la administración de George W. Bush.
Sigfrido Reyes, congresista de esa bancada, expresó que el indulto al terrorista evidencia la doble moral y las segundas intenciones del discurso de Bush frente al terrorismo.
Posada Carriles residió en El Salvador durante la guerra civil en la nación centroamericana (1980-1992). En ese país mantuvo vínculos con sectores militares y políticos ultraderechistas.
En la década pasada, después de capturar a dos salvadoreños en La Habana por cometer atentados criminales en instalaciones hoteleras, Cuba acusó a Posada Carriles de haber creado una red terrorista en Centroamérica.
Aldo Díaz Lacayo, nombrado embajador de Nicaragua en la ONU, dijo que Posada carriles no fue acusado de terrorista por Estados Unidos, sino de simple violador de sus leyes migratorias.
Su libertad bajo fianza -opinó- constituye una concesión del sistema judicial norteamericano al poder Ejecutivo.
Organizaciones y personalidades mexicanas demandaron a la Casa Blanca que en cumplimiento de sus obligaciones internacionales aplique justicia contra el connotado terrorista.
Los intelectuales Víctor Flores, Pablo Romo, Carlos Fazio, Gilberto López y Héctor Díaz-Polanco, entre otros, coinciden en que Estados Unidos usa su campaña antiterrorista para bombardear otras naciones, pero excarcela a un criminal con maniobras pseudolegales.
Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz y presidente de la Fundación Servicio de Paz y Justicia (SERPAJ Argentina), conceptuó el hecho como un ultraje a la conciencia de la humanidad.
La Federación Latinoamericana de Periodistas rebatió la decisión del tribunal norteamericano, llamó a los comunicadores a objetar la medida y a emplazar a la gran prensa internacional a no ser cómplice de la minimización del veredicto a favor del asesino.
Declaración de NOAL contra liberación de Posada Carriles
Salvadoreños marcharán contra liberación de Posada Carriles
Organizaciones españolas repudian liberación de Posada
Cubanos firmes en su condena a excarcelación de terrorista
Escritor boliviano repudia excarcelación de Posada Carriles
Indígenas ecuatorianos condenan liberación de terrorista
Cientos de jóvenes y familiares de las víctimas del atentado en 1976 contra un avión civil cubano con 73 personas a bordo, en Barbados, perpetrado por el terrorista, participan en una vigilia en esta capital, como parte de las acciones de rechazo a la medida.
Esa velada debe terminar en horas de la tarde de hoy frente a la Oficina de Intereses norteamericana, en la avenida costanera del Malecón, en la capital cubana.
El comité venezolano por la extradición de Posada Carriles anunció el comienzo de una nueva jornada para insistir en la detención del criminal y denunciar la parcialidad de la Casa Blanca en el tema.
Varias ciudades norteamericanas se preparan para una protesta el próximo 11 de mayo, convocada por la coalición antibelicista ANSWER y el Comité Nacional por la liberación de cinco antiterroristas cubanos presos en ese país desde 1998.
Dennis Kucinich, legislador demócrata norteamericano, consideró que Posada Carriles debe ser extraditado a Venezuela, desde donde se fugó en 1985, para ser juzgado por sus crímenes.
Aseguró que desencarcelar al terrorista internacional es un acto de negación de la "guerra contra el terrorismo" supuestamente alentada por Washington.
Dirigentes del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) de El Salvador calificaron de insulto a Latinoamérica la liberación del criminal tras pagar una fianza de 250 mil dólares, que lo sacó de una cárcel de Nuevo México.
Medardo González, coordinador general efemelenista, catalogó de irresponsable la decisión de la administración de George W. Bush.
Sigfrido Reyes, congresista de esa bancada, expresó que el indulto al terrorista evidencia la doble moral y las segundas intenciones del discurso de Bush frente al terrorismo.
Posada Carriles residió en El Salvador durante la guerra civil en la nación centroamericana (1980-1992). En ese país mantuvo vínculos con sectores militares y políticos ultraderechistas.
En la década pasada, después de capturar a dos salvadoreños en La Habana por cometer atentados criminales en instalaciones hoteleras, Cuba acusó a Posada Carriles de haber creado una red terrorista en Centroamérica.
Aldo Díaz Lacayo, nombrado embajador de Nicaragua en la ONU, dijo que Posada carriles no fue acusado de terrorista por Estados Unidos, sino de simple violador de sus leyes migratorias.
Su libertad bajo fianza -opinó- constituye una concesión del sistema judicial norteamericano al poder Ejecutivo.
Organizaciones y personalidades mexicanas demandaron a la Casa Blanca que en cumplimiento de sus obligaciones internacionales aplique justicia contra el connotado terrorista.
Los intelectuales Víctor Flores, Pablo Romo, Carlos Fazio, Gilberto López y Héctor Díaz-Polanco, entre otros, coinciden en que Estados Unidos usa su campaña antiterrorista para bombardear otras naciones, pero excarcela a un criminal con maniobras pseudolegales.
Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz y presidente de la Fundación Servicio de Paz y Justicia (SERPAJ Argentina), conceptuó el hecho como un ultraje a la conciencia de la humanidad.
La Federación Latinoamericana de Periodistas rebatió la decisión del tribunal norteamericano, llamó a los comunicadores a objetar la medida y a emplazar a la gran prensa internacional a no ser cómplice de la minimización del veredicto a favor del asesino.
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