San Salvador, 26 nov (PL) Cerca de un centenar de jóvenes salvadoreños protestaron hoy en la carretera que conduce al occidental departamento de Santa Ana contra la construcción de un basurero en el cantón Cutumay Camones.
Los manifestantes con el rostro encapuchado criticaron la actitud de la Unidad de Mantenimiento de Orden (UMO), cuando el jueves último dispersaron una protesta contra ese relleno sanitario.
Subrayaron que agentes de la UMO reprimieron con gas pimienta la manifestación que mantenían desde el miércoles los habitantes de la comunidad Cutumay Camones, a 65 kilómetros de esta capital, opuestos a la construcción del controversial basurero.
Los jóvenes dijeron que se mantendrán en la zona hasta que sea instalada una mesa de diálogo para resolver el conflicto.
Esperan la participación de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, la Iglesia Católica y el Instituto de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, a fin de evitar los abusos policiales.
La construcción del basural en Cutumay Camones contaminaría los mantos acuíferos de la zona que abastecen a más de ocho mil habitantes, afirmó el presidente de la Unidad Ecológica Salvadoreña, Angel Ibarra.
Destacó que a pocos metros de donde se pretende construir el basurero se encuentran las reservas de agua de la localidad.
El estudio Análisis Medioambiental de El Salvador, del Banco Mundial (marzo 2006), reveló que el 98 por ciento de las aguas negras residenciales y el 90 por ciento de las industriales se vierten en ríos y quebradas sin ningún tipo de tratamiento.
Se estima que el 90 por ciento del recurso hídrico en esta nación tiene algún grado de contaminación por plomo, aluminio, manganeso, hierro y nitratos.
Los manifestantes con el rostro encapuchado criticaron la actitud de la Unidad de Mantenimiento de Orden (UMO), cuando el jueves último dispersaron una protesta contra ese relleno sanitario.
Subrayaron que agentes de la UMO reprimieron con gas pimienta la manifestación que mantenían desde el miércoles los habitantes de la comunidad Cutumay Camones, a 65 kilómetros de esta capital, opuestos a la construcción del controversial basurero.
Los jóvenes dijeron que se mantendrán en la zona hasta que sea instalada una mesa de diálogo para resolver el conflicto.
Esperan la participación de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, la Iglesia Católica y el Instituto de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, a fin de evitar los abusos policiales.
La construcción del basural en Cutumay Camones contaminaría los mantos acuíferos de la zona que abastecen a más de ocho mil habitantes, afirmó el presidente de la Unidad Ecológica Salvadoreña, Angel Ibarra.
Destacó que a pocos metros de donde se pretende construir el basurero se encuentran las reservas de agua de la localidad.
El estudio Análisis Medioambiental de El Salvador, del Banco Mundial (marzo 2006), reveló que el 98 por ciento de las aguas negras residenciales y el 90 por ciento de las industriales se vierten en ríos y quebradas sin ningún tipo de tratamiento.
Se estima que el 90 por ciento del recurso hídrico en esta nación tiene algún grado de contaminación por plomo, aluminio, manganeso, hierro y nitratos.
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