Licda. Norma Guevara de Ramirios
Ni la salida de Justo Villar, portero de la selección paraguaya en el mundial de fútbol a los siete minutos del juego o los dos goles de Argentina pueden hacernos olvidar que el gobierno de ARENA ha incrementado el precio a la energía eléctrica golpeando drásticamente la situación económica de todas las familias en nuestro país; un golpe así no se decide de un día para otro, tiene que haberse planificado largamente y sin embargo los funcionarios del Ministerio de Economía, de la SIGET y de CEL se negaron a informar en la Asamblea Legislativa las razones y la magnitud real del incremento.
Dicen 14%, sin duda es otra mentira, no se puede olvidar que en cada recibo nos cobran por uso fijo de la red, por uso variable de la red, por una supuesta atención al cliente y por último por lo que consumimos de energía; de manera que cuando afirman que es 14%, se estarán refiriendo al total de la factura que aplicado estrictamente al consumo de energía debe ser un porcentaje mayor.
Aquí no aparece la Defensoría del Consumidor para exigir que el precio se ajuste a los costos, de la SIGET ni hablar, está probada su docilidad para proteger las ganancias de las distribuidoras y generadoras, se quedan literalmente a ser entidades de fachada que protegen a los monopolios y los oligopolios y para que se sepa que existen, se portan altaneros frente a problemas secundarios.
El argumento de que el petróleo está caro y que la demanda ha subido son simples generalidades que esconden la verdadera razón del alza y es que el gobierno protege más las ganancias y la «estabilidad» de las empresas transnacionales que al interés general de la población salvadoreña.
El Artículo 165 de la Constitución establece que los Ministros o encargados del Despacho y Presidentes de Instituciones Autónomas deberán concurrir a la Asamblea Legislativa para contestar las interpelaciones que se les hicieren.
Por eso, ante el silencio cómplice de tales funcionarios era correcta y justa la intención de las y los diputados del FMLN y CD de congelar los precios mientras el gobierno demuestra que en la fijación de una nueva tarifa se ha cumplido la ley y se protege el interés general de la población; lástima grande que las amenazas de veto hechas por el Presidente Saca produjeran el rápido alineamiento de PCN y PDC. ¿Por qué mentir omitiendo información como lo han hecho entidades autónomas como SIGET y CEL en un asunto tan delicado como el precio de la energía eléctrica?, ¿porqué 3 días antes de decretar el golpe a la población fingen desconoci-miento quienes están por ley, obligados a conocer, regular y supervisar? Ellos, esos funcionarios como la Ministra de Economía, el Superintendente de Energía y Telecomunicaciones, el Presidente de CEL saben que han incumplido su deber de informar oportunamente y con verdad al pueblo salvadoreño a través de sus representantes, debiéramos exigir la destitución de sus cargos, pues al no hacerlo se consolida esta forma perversa de impunidad que mata de otro modo a la gente.
La propaganda gubernamental pretende que aceptemos sus aumentos con el cuento de que se subsidia a quienes consumen menos de 100 kilowats, y a la población que usa gas propano como si tales medidas fueran una decisión reciente del actual gobierno, o como si recordando tales hechos se aumentará el ingreso de cada familia; lejos de eso se nos amenaza con el incremento de precios del agua también.
El efecto es tan grosero que el discurso repetitivo y adormecedor discurso del I Presidente podría finalizar. Ojalá se percatara el gobierno que en el manejo de la energía, en el incremento desmedido de precios está provocando deterioro grave de la economía, está jugando con fuego, es algo para lo cual las cortinas de humo difícilmente le funcionen y ni siquiera el mundial de fútbol podrá librarle de la condena y de la exigencia de corregir tan mal proceder.
Ni la salida de Justo Villar, portero de la selección paraguaya en el mundial de fútbol a los siete minutos del juego o los dos goles de Argentina pueden hacernos olvidar que el gobierno de ARENA ha incrementado el precio a la energía eléctrica golpeando drásticamente la situación económica de todas las familias en nuestro país; un golpe así no se decide de un día para otro, tiene que haberse planificado largamente y sin embargo los funcionarios del Ministerio de Economía, de la SIGET y de CEL se negaron a informar en la Asamblea Legislativa las razones y la magnitud real del incremento.
Dicen 14%, sin duda es otra mentira, no se puede olvidar que en cada recibo nos cobran por uso fijo de la red, por uso variable de la red, por una supuesta atención al cliente y por último por lo que consumimos de energía; de manera que cuando afirman que es 14%, se estarán refiriendo al total de la factura que aplicado estrictamente al consumo de energía debe ser un porcentaje mayor.
Aquí no aparece la Defensoría del Consumidor para exigir que el precio se ajuste a los costos, de la SIGET ni hablar, está probada su docilidad para proteger las ganancias de las distribuidoras y generadoras, se quedan literalmente a ser entidades de fachada que protegen a los monopolios y los oligopolios y para que se sepa que existen, se portan altaneros frente a problemas secundarios.
El argumento de que el petróleo está caro y que la demanda ha subido son simples generalidades que esconden la verdadera razón del alza y es que el gobierno protege más las ganancias y la «estabilidad» de las empresas transnacionales que al interés general de la población salvadoreña.
El Artículo 165 de la Constitución establece que los Ministros o encargados del Despacho y Presidentes de Instituciones Autónomas deberán concurrir a la Asamblea Legislativa para contestar las interpelaciones que se les hicieren.
Por eso, ante el silencio cómplice de tales funcionarios era correcta y justa la intención de las y los diputados del FMLN y CD de congelar los precios mientras el gobierno demuestra que en la fijación de una nueva tarifa se ha cumplido la ley y se protege el interés general de la población; lástima grande que las amenazas de veto hechas por el Presidente Saca produjeran el rápido alineamiento de PCN y PDC. ¿Por qué mentir omitiendo información como lo han hecho entidades autónomas como SIGET y CEL en un asunto tan delicado como el precio de la energía eléctrica?, ¿porqué 3 días antes de decretar el golpe a la población fingen desconoci-miento quienes están por ley, obligados a conocer, regular y supervisar? Ellos, esos funcionarios como la Ministra de Economía, el Superintendente de Energía y Telecomunicaciones, el Presidente de CEL saben que han incumplido su deber de informar oportunamente y con verdad al pueblo salvadoreño a través de sus representantes, debiéramos exigir la destitución de sus cargos, pues al no hacerlo se consolida esta forma perversa de impunidad que mata de otro modo a la gente.
La propaganda gubernamental pretende que aceptemos sus aumentos con el cuento de que se subsidia a quienes consumen menos de 100 kilowats, y a la población que usa gas propano como si tales medidas fueran una decisión reciente del actual gobierno, o como si recordando tales hechos se aumentará el ingreso de cada familia; lejos de eso se nos amenaza con el incremento de precios del agua también.
El efecto es tan grosero que el discurso repetitivo y adormecedor discurso del I Presidente podría finalizar. Ojalá se percatara el gobierno que en el manejo de la energía, en el incremento desmedido de precios está provocando deterioro grave de la economía, está jugando con fuego, es algo para lo cual las cortinas de humo difícilmente le funcionen y ni siquiera el mundial de fútbol podrá librarle de la condena y de la exigencia de corregir tan mal proceder.
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